Conquistador español de México. Pocas veces la historia ha atribuido al brío y determinación de un solo hombre la conquista de un vasto territorio; en esta reducida lista se halla Hernán Cortés, que siempre prefirió quemar sus naves a retroceder. Con escasos medios, sin apenas más apoyo que su inteligencia y su intuición militar y diplomática, logró en sólo dos años reducir al dominio español el esplendoroso Imperio azteca, poblado, según estimaciones, por unos quince millones de habitantes.
Es cierto que diversas circunstancias favorables lo acompañaron, y que, llevado por la ambición y la sed de honores y riquezas, cometió abusos y violencias, al igual que otros conquistadores. Pero, de todos ellos, Cortés fue el capitán más culto y más capaz, y aunque ello no sirva de atenuante, lo impulsó también un gran fervor religioso; su conciencia moral llegó a plantearle si era lícito esclavizar a los indios, una duda insólita en los albores de la colonización de América.
Procedente de una familia de hidalgos de Extremadura, Hijo único de Martín Cortés de Monroy y de Catalina Pizarro Altamirano, Hernán Cortés estudió brevemente en la Universidad de Salamanca. En 1504 pasó a las Indias, recién descubiertas por Cristóbal Colón, y se estableció como escribano y terrateniente en La Española (Santo Domingo).
HERNAN CORTES
Gobernador y Capitán General de la Nueva España, 1° Marqués del Valle de Oaxaca
En 1511 participó en la expedición a Cuba como secretario del gobernador Diego Velázquez de Cuéllar, con quien emparentó al casarse con su cuñada, Catalina Suárez Marcaida ; Velázquez le nombró alcalde de la nueva ciudad de Santiago de Cuba. A finales de 1518 Velázquez le confió el mando de la tercera expedición, tras las de Francisco Hernández de Córdoba y Juan de Grijalva, para continuar sus descubrimientos en la costa de Yucatán.
Sin embargo, el gobernador desconfiaba de Cortés, a quien ya había encarcelado en una ocasión acusado de conspiración, y decidió relevarle del encargo antes de partir. Advertido Cortés, aceleró su marcha y se hizo a la mar el 10 de febrero de 1519, antes de recibir la notificación. Con once barcos, unos seiscientos hombres, dieciséis caballos y catorce piezas de artillería, Hernán Cortés navegó desde Santiago a Cozumel y Tabasco; derrotó a los mayas allí establecidos y recibió (entre otros regalos) a la india doña Marina, también llamada Malinche, que le serviría como amante, consejera e intérprete durante toda la campaña. Su gran inteligencia, su dominio de las lenguas mayenses y náhuatl, su conocimiento de la psicología y costumbres de los indios, y su fidelidad hacia los españoles, hicieron de la Malinche una de las más extraordinarias y controvertidas mujeres de la historia de América.
Cortés instaló su campamento enfrente de la ciudad de Quiahuiztlán habitada ancestralmente por los Totonacas, y poco después, el Viernes Santo de 1519, lo convirtió en ciudad, con el nombre de Villa Rica de la Vera Cruz. Cortés, decidido a romper toda relación de obediencia con Diego de Velázquez, creó el cabildo de esa Villa Rica, el cual a su vez lo nombró capitán general y justicia mayor. De este modo su única vinculación iba a ser ya con la Corona y no con Velázquez, a quien no le reconocía mando sobre aquellas nuevas tierras.
En Vera Cruz tuvo noticias de la existencia del Imperio azteca en el interior, cuya capital Tenochtitlan se decía que guardaba grandes tesoros, y se aprestó a su conquista.
Para evitar la tentación de regresar que amenazaba a muchos de sus hombres ante la evidente inferioridad numérica, Hernán Cortés hundió sus barcos en Veracruz; de este episodio procede la frase hecha « quemar la naves », expresión de una determinación irrevocable.
Pronto logró la alianza de algunos pueblos indígenas sometidos a los aztecas, como los toltecas y tlaxcaltecas. El 16 de agosto de 1519, Cortés abandonó la costa e inicia su marcha hacia el interior, rumbo hacia al corazón del Imperio Mexica, con un ejército de 13.000 guerreros totonacas, 400 soldados españoles con armas de fuego y 15 caballos.
A fines de agosto el ejército de Cortés llegó al territorio de la Confederación o República de Tlaxcala.
El estendarte de Hernan Cortés
La ruta de Cortés hacia Tenochtitlan
Por entonces, Tlaxcala y Tenochtitlán representaban dos concepciones opuestas de organización política que las llevó al enfrentamiento abierto. Tlaxcala se había organizado como una confederación de ciudades-estados unidas en una república gobernada por un Senado; México-Tenochtitlán, por el contrario se organizó como un imperio. A partir de 1455 el Imperio Azteca, conformado sobre la base de la Triple Alianza entre Tenochtitlán, Texcoco y Tlacopan, había iniciado las llamadas «guerras floridas» contra Huejotzingo, Cholula y Tlaxcala, con el fin de capturar prisioneros para sus sacrificios religiosos.
Inicialmente la República de Tlaxcala negó a los invasores el paso por su territorio, pero, después de dos derrotas, ofreció la paz a Cortés. Este acuerdo estableció la crucial alianza con los tlaxcaltecas, enemigos acérrimos de los aztecas, quienes nunca habían podido conquistar su territorio.
En su paso hacia Tenochtitlan Cortés llegó a Cholula, aliada del Imperio Azteca, que era la segunda ciudad más grande después de México-Tenochtitlan, con 30.000 habitantes. Luego de haber recibido a Cortés y su enorme ejército, las autoridades de Cholula planearon tenderle una emboscada y aniquilar a los españoles. Alertado, Cortés mandó inmediatamente a su ejército a atacar, causando lo que se conoce como “la matanza de Cholula” , en la que más de 5.000 hombres murieron en cinco horas.
A su llegada a México-Tenochtitlan, Cortés quedó sorprendido por la belleza del lugar. En su paso desde Cholula, con un ejército de unos trescientos españoles y el apoyo de unos 3.000 tlaxcaltecas, Cortés había recorrido el camino hacia el Valle de México, cruzando por entre dos volcanes, el Popocatépetl y el Iztaccíhuatl hasta llegar a en un paraje boscoso y de esplendida belleza que hasta hoy lleva el nombre de Paso de Cortés.
A la entrada de Tenochtitlán, realizada el 8 de noviembre de 1519, se produjo el encuentro de Moctezuma II y Cortés, haciendo de intérprete doña Marina. La posible identificación de los españoles con seres divinos y de Cortés con el anunciado regreso del dios Quetzalcoátl favoreció quizá esta acogida pacifica a unos extranjeros que, sin embargo, empezaron enseguida a comportarse como invasores ambiciosos y violentos.
Moctezuma II recibe a Hernán Cortés
Debido a advertencias previas de los tlaxcaltecas, a los españoles les empezó a inquietar la posibilidad de ser asesinados y cuatro capitanes y doce soldados se presentaron a Cortés para hacerle presente la conveniencia de prender al emperador, manteniéndole como rehén, para que respondiera con su vida de la vida del ejército. Una noticia precipitó la resolución : la batalla de Nautla, en las cercanías de Vera Cruz, entre los mexicas y los totonacas aliados de los conquistadores españoles. En el conflicto los mexicas mataron a Juan de Escalante, alguacil mayor, y a siete españoles lo que supuso un desprestigio para las armas españolas al ver que no eran semidioses y que podían ser vencidos. Una vez que Moctezuma cayó en la celada de los españoles, Cortés lo tuvo como rehén so pena de muerte inmediata. Cortés exigió que los caciques autores de la agresión a Veracruz fueran castigados y consiguió también que Moctezuma se declarase vasallo de Carlos V. La casta sacerdotal y la nobleza aztecas conjuraron para liberar a su señor y aniquilar a los españoles.
Mientras tanto, para castigar la rebeldía de Cortés y obligarlo a volver a Cuba, en maio de 1520, el gobernador Diego Velázquez envió contra él una expedición al mando de Pánfilo de Narváez.
Para colmo, pusieron sobre aviso a Moctezuma de que Cortés era un rebelde a su rey, y que si podía, lo matase. Así que Cortés no tuvo más remedio que dejar una guarnición de poco más de un centenar de españoles en Tenochtitlan al mando de Pedro de Alvarado, y él con trescientos españoles y varios cientos de indios, salió al encuentro de las tropas de Narváez. En Cempoala Cortés consiguió vencer y hacer prisionero a Narváez, y las tropas de éste se pasaron en masa a su bando.
Cuando regresó a Tenochtitlán, el 24 de junio de 1520, Cortés se encontró con una gran agitación indígena contra los españoles, provocada por los ataques realizados a sus creencias y símbolos religiosos y por la matanza que había desencadenado Pedro de Alvarado para desbaratar una supuesta conspiración. Cortés consiguió que Moctezuma tratase de apaciguar a los inconformes y que dejasen salir a los españoles de la ciudad. Existen dos versiones a la muerte de Moctezuma: una es que cuando hablaba a su pueblo, recibió una pedrada de los propios aztecas que lo hirió de muerte; la otra (menos probable y aportada por los aztecas) dice que Hernán Cortés ordenó matarlo cuando vio que no podía calmar al pueblo.
La única salida era la retirada : Hernán Cortés se vio entonces obligado a abandonar Tenochtitlán en la lluviosa noche del 30 de junio al 1 de julio de 1520, conocida como la Noche Triste. En aquella retirada cayeron la mayoría de los castellanos, sobre todo los que llegaron con Narváez, que al llevar muchas piezas de oro consigo, a pesar de las advertencias de Cortés, murieron ahogados en el lago. Se perdieron además gran cantidad de piezas de artillería y de caballos, así como gran parte del tesoro que se transportaba. Perseguidos por los aztecas (ahora bajo el mando de Cuauhtémoc), el 7 de julio, cerca de Otumba, los españoles hicieron frente a los perseguidores en una batalla en la que los aztecas fueron derrotados y huyeron en desbandada. Los conquistadores marcharon en busca del auxilio de sus aliados tlaxcaltecas y no fue sino hasta casi un año después, es decir el 30 de mayo de 1521, cuando dieron principio al asedio formal de la ciudad de México-Tenochtitlán.
Para ello concentró Cortés más de 80.000 tlaxcaltecas y reforzó sus propias tropas con la llegada de otras varias expediciones a Veracruz. Desde fines de abril de ese mismo año había botado al agua, en el lago, trece bergantines que jugaron un papel muy importante en el asedio de la isla donde se erigía la ciudad.
Unos y otros, los cronistas españoles e indígenas, refieren luego lo que fueron el asedio y la resistencia indígena a lo largo de casi ochenta días de sitio. El 13 de agosto de 1521 cayó la ciudad de Tenochtitlán en manos de Hernán Cortés que aprisionó al joven Cuauhtémoc y lo torturó para obligarlo a decirle donde guardaban sus tesoros. Destruida la capital azteca, construyó en el mismo lugar (una isla en el centro de un lago) la ciudad española de México.
El asedio de Tenochtitlan en 1521
“El mapa de Tenochtitlan de Cortés (1524)”
en Praeclara Ferdinā di Cortesii de Noua maris Oceani Hyspania narratio, Nuremberg, Friedrich Peypus, 1524
Dominado ya el antiguo Imperio azteca, Cortés lanzó expediciones hacia el sur para anexionar los territorios de Yucatán, Honduras y Guatemala. Los detalles de la conquista de México, así como los argumentos que justificaban las decisiones de Hernán Cortés fueron expuestos en las cuatro Cartas de relación que envió al rey. En 1522 fue nombrado gobernador y capitán general de Nueva España (nombre que dieron los conquistadores al territorio mexicano).
Sin embargo, sus enemigos intrigaron en la corte del emperador Carlos V, acusándolo de detraer oro del quinto real y del reparto a los conquistadores y sospechando que había dado orden de envenenar a su esposa Catalina Juárez y a varios de los enviados con provisiones reales.
En 1524, obedeciendo instrucciones de Carlos V, Cortés emprendió un viaje a España y se entrevistó con el emperador en Toledo. Aunque no recobró el gobierno de la Nueva España, obtuvo al menos el título de Marqués del Valle de Oaxaca, así como 22 villas y 23.000 vasallos, además de conservar el cargo honorífico de capitán general, aunque sin funciones gubernativas.
Hernan Cortés, 1° Marques del Valle de Oaxaca
Casado con doña Juana Ramirez de Arellano y Zúñiga, hija del conde de Aguilar, Hernan Cortés regresó a México hacia mediados de 1530 y desde 1532, emprende una serie de expediciones en el mar del Sur (océano Pacífico). Después de haber patrocinado dos viajes de exploración en la Mar del Sur y sin haber obtenido resultados materiales, Hernán Cortés decidió encabezar el tercer viaje de exploración, rumbo al noroeste, y el día 3 de mayo de 1535 arribó a la bahía que nombró Bahía de la Santa Cruz, actualmente La Paz (Baja California Sur) y decidió establecer una colonia. Sin embargo, frente al problema del abastecimiento de la población, Cortés retornó a la Nueva España y ordenó el abandono de la colonia y el retorno de los pobladores a la Nueva España.
En 1539 Hernan Cortés despachó su cuarta expedición al Mar del Sur. Encomendó esta empresa al capitán Francisco de Ulloa que penetró hasta la desembocadura del río Colorado y, regresando hasta el extremo sur de la península, remontó por el Pacífico hasta más allá de la isla de Cedros. Con fecha de 5 de Abril de 1540 Francisco de Ulloa dirigió a Cortés, desde la Isla de Cedros, una relación de los sucesos de la exploración. Nunca más se supo de Francisco de Ulloa y de sus compañeros de navegación.
Para hacer defensa de sus derechos, Cortés emprendió nuevo viaje a España. Los restantes años de su vida que transcurrieron todos en España fueron para Cortés tiempo difícil en que se vio envuelto en una serie de litigios y sus reclamaciones nunca obtuvieron plena satisfacción.
Hernán Cortés murió en el viernes 2 de diciembre del año 1547, a la edad de 62 años, en Castilleja de la Cuesta, cerca de Sevilla.
Su primer entierro fue en la iglesia de San Isidoro del Campo, en Sevilla. En 1566 sus restos mortales fueron trasladados a Nueva España y enterrados en la iglesia adjunta al convento de San Francisco, en Texcoco. De allí, en 1629, pasaron a la capilla mayor del convento de San Francisco, en la ciudad de México. Su último reposo lo alcanzó en 1794, en la iglesia de Jesús Nazareno, contigua al hospital de Jesús fundado por él.
Martino CORTES DE MONROY,
(n. 1455, + 1525),
Hidalgo, de los Señores de Monroy, Capitan de caballeria,
& 1483 Caterina PIZARRO (ALTAMIRANO),
(n. 1465c., + 1535)
I
(n. 1485, + 1547),
Conquistador de Mexico 1519-1524,
1° Marqués del Valle de Oaxaca 1529-1547,
& 1529 Juana RAMIREZ DE ARELLANO,
(n. 1505c., + 1578)
de los Condes de Aguilar de Inestrillas
I
Martin CORTES,
(n. 1532, + 1589),
2° Marqués del Valle de Oaxaca,
& 1548 Ana RAMIREZ DE ARELLANO,
(n. 1533, + 1578),
7° Condesa de Aguilar de Inestrillas
I
Juana CORTES,
(n. 1560c., + 1628),
5° Marquesa del Valle de Oaxaca,
& 1592 Pedro II CARRILLO DE MENDOZA,
(n. 1550c., + 1619),
9° Conde de Priego
I
Estefania CARRILLO DE MENDOZA,
(n. 1595, + 1635),
6° Marquesa del Valle de Oaxaca,
& 1617 Diego I TAGLIAVIA ARAGONA,
(n. 1596, + 1663),
4° Duca di Terranova, Cavaliere dell’Ordine del Toson d’Oro,
Gran Ammiraglio e Gran Connestabile di Sicilia
I
Giovanna I TAGLIAVIA ARAGONA CORTES,
(n. 1619, + 1692),
5° Duchessa di Terranova, 7° Marchesa del Valle de Oaxaca,
& 1639 Ettore IV PIGNATELLI,
(n. 1620, + 1674),
4° Principe di Noja, 6° Duca di Monteleone,
Cavaliere dell’Ordine del Toson d’Oro, Viceré d’Aragona
I
Andrea Fabrizio PIGNATELLI ARAGONA CORTES,
(n. 1640, + 1677),
5° Principe di Noja, 7° Duca di Monteleone,
8° Marchese del Valle de Oaxaca, Cavaliere dell’Ordine del Toson d’Oro,
& 1665 Teresa PIMENTEL,
(n. 1646, + 1707),
dei Conti / Duchi di Benavente
I
Giovanna II PIGNATELLI ARAGONA CORTES,
(n. 1666, + 1723),
6° Principessa di Noja, 8° Duchessa di Monteleone,
9° Marchesa del Valle de Oaxaca,
& 1679 Nicola PIGNATELLI,
(n. 1648, + 1730);
dei Principi di Noja, Cavaliere dell'Ordine del Toson d'Oro,
Gran Ammiraglio e Gran Connestabile di Sicilia,
Viceré di Sardegna, Viceré di Sicilia
I
Diego I PIGNATELLI ARAGONA CORTES,
(n. 1687, + 1750),
7° Principe di Noja, 9° Duca di Monteleone,
10° Marchese del Valle de Oaxaca,
Cavaliere dell'Ordine del Toson d'Oro,
Gran Ammiraglio e Gran Connestabile di Sicilia,
& 1717 Margherita PIGNATELLI,
(n. 1698, + 1774),
4° Duchessa di Bellosguardo
I
Maria Francesca PIGNATELLI ARAGONA CORTES,
(n. 1721, + 1788),
dei Principi di Noja, Duchi di Terranova,
Marchesi del Valle de Oaxaca,
& 1739 Girolamo II PIGNATELLI,
(n. 1721, + 1771),
1° Principe di Moliterno, 3° Principe di Marsiconovo
I
Giovanni Battista III PIGNATELLI,
(n. 1740, + 1805),
2° Principe di Moliterno, 4° Principe di Marsiconovo,
6° Principe di Montecorvino,
& 1772 Maria Luisa D’AVALOS,
(n. 1748, + 1781),
dei Principi di Montesarchio, Marchesi del Vasto e di Pescara
I
Maria Emanuela PIGNATELLI,
(n. 1775, + 1818),
Principessa di Moliterno e di Marsiconovo (erede),
& 1796 Giuseppe Gerardo GALLONE,
(n. 1766, + 1806),
6° Principe di Tricase
I
Giovanni Battista GALLONE,
(n. 1800, + 1868),
7° Principe di Tricase, 4° Principe di Moliterno,
6° Principe di Marsiconovo,
& 1818 Maria Felicia STATELLA,
(n. 1801, + 1846),
dei Principi di Cassaro
I
Giuseppe GALLONE,
(n. 1819, + 1898),
8° Principe di Tricase, 5° Principe di Moliterno,
7° Principe di Marsiconovo,
& 1847 Antonietta MELODIA,
(n. 1829, + 1924),
dei Baroni di San Pietro in Melicozza
I
Pietro Giovanni Battista GALLONE,
(n. 1855, + 1931),
9° Principe di Tricase, 6° Principe di Moliterno,
8° Principe di Marsiconovo (ceduto),
& 1925 Giuseppina MONCADA,
(n. 1860, + 1946),
dei Principi di Paterno’
I
Maria Bianca GALLONE,
(n. 1895, + 1982),
10° Principessa di Tricase, 7° Principessa di Moliterno,
& 1915 Augusto III DELLA POSTA,
(n. 1890, + 1970),
7° Duca di Civitella Alfedena
I
Simonetta DELLA POSTA,
(n. 1916, + 1986),
dei Duchi di Civitella Alfedena,
& 1939 Aldo GUERRI DALL’ORO,
(n. 1913, + 2004),
Conte Guerri dall’Oro
I
Guido GUERRI DALL’ORO GALLONE,
(n. 1941, + 2019),
Conte Guerri dall’Oro, 11° Principe di Tricase, 8° Principe di Moliterno,
& 1971 Jeanine SCHNEIDER,
(n. 1945)
I
Simon GUERRI DALL’ORO GALLONE,
(n. 1985),
Conte Guerri dall’Oro, 12° Principe di Tricase, 9° Principe di Moliterno
& 2017 Coline MOREL,
(n. 1986)
I
Léon GUERRI DALL’ORO GALLONE,
(n. 2018),
Conte Guerri dall’Oro, 13° Principe di Tricase, 10° Principe di Moliterno
La corona española solía premiar a los conquistadores por sus esfuerzos y batallas en América y Filipinas, concediéndoles escudos de armas y encomiendas de indígenas; y sólo excepcionalmente les otorgó señoríos, por ejemplo, el Ducado de Veragua a los descendientes de Cristóbal Colón, el Ducado de Atlixco a José Sarmiento de Valladares, conde de Moctezuma y el Marquesado del Valle de Oaxaca a Hernán Cortés.
Por Real Cédula del 6 de julio de 1529, en reconocimiento por sus servicios a la Corona «y especialmente en el descubrimiento y población de la Nueva España», el emperador Carlos V le concedió a Hernán Cortés el título de Marqués del Valle de Oaxaca; le donó 23 mil vasallos a perpetuidad, con jurisdicción civil y criminal, conforme al mero y mixto imperio de tipo castellano con modalidades indianas, pues los vasallos eran españoles e indios; y el grado de Capitán General de la Nueva España.
Hernán Cortés, 1° Marqués del Valle de Oaxaca
Hernán Cortés, 1° Marqués del Valle de Oaxaca
(1485-1547)
La superficie total del Marquesado era de 11,550 km², aunque éste distaba de constituir una unidad geográfica, pues sus territorios se hallaban separados entre sí :
El 27 de julio de 1529 se emitió una nueva Cédula Real, permitiendo a Cortés establecer un mayorazgo. La institución del mayorazgo, en 1535, garantizó la permanencia del Marquesado, ya que implicó la mayor parte de las propiedades de Cortés, haciéndolo heredable, junto con la dignidad del Marquesado. El mayorazgo también estableció la sucesión al título, que es de preferencia por la primogenitura masculina, es decir, a la mujer se le permite acceder solo si carece de hermanos vivos y si sus hermanos difuntos no dejaron descendientes masculinos legítimos. También se especifica que el Marqués o Marquesa tiene que ser católico, leal al rey, y llevar el nombre y las armas de Cortés.
Martin Cortés, 2° Marqués del Valle de Oaxaca
Hijo del conquistador Hernán Cortés y de Juana Ramirez de Arellano y Zúñiga, Martin acompañó a su padre en su último viaje a España (1540) y a Felipe II a Flandes, a Inglaterra y en la batalla de San Quintín.
En 1562 el rey le dejó todas las villas otorgadas a su padre. En España el 2° Marqués del Valle de Oaxaca casó con Ana Ramírez de Arellano, sobrina suya, y mantuvo estrecha relación con aristócratas y escritores, como López de Gómara, quien le dedicó su obra sobre la vida de Hernán Cortés.
En 1563, volvió a México, donde no había estado desde los ocho años, y se le hizo un fastuoso recibimiento, indicador de la gloria y popularidad que había alcanzado su padre; junto a él llegaron sus hermanastros bastardos Luis y Martín « el Mestizo », hijo éste de doña Marina. Por su linaje y propiedades, Martín Cortés era el señor más rico y poderoso de Nueva España.
Como sucediera con su padre, Martín comenzó a chocar con el virrey de entonces, Luis de Velasco. A la muerte de éste (1564), el Ayuntamiento de México solicitó que no se nombrara nuevo virrey y que el cargo de capitán general pasara directamente a Martín Cortés. Aquí comenzó un largo enfrentamiento entre la Audiencia y el hijo del Conquistador.
En 1566, las autoridades virreinales descubrieron la llamada "Conspiración del Marqués del Valle", de Don Martín Cortés, 2° Marqués y su hermano Martín Cortés « el Mestizo », para desconocer al rey de España, con el apoyo de los hijos de los conquistadores, quienes estaban descontentos con las Leyes Nuevas que restringieron la herencia de encomiendas.
La Audiencia no tuvo más remedio que detener a los conspiradores, entre ellos al propio Martín, el 16 de julio de 1566. Cuando muchos de los rebeldes habían sido ya ajusticiados y les tocaba el turno a los hermanos Cortés, llegó a México un nuevo virrey, Gastón de Peralta, marqués de Falces, que revisó los procesos y liberó, finalmente, a Martín, enviándolo hacia España.
En la metrópoli, el hijo de Cortés fue absuelto de los graves cargos que se le imputaban pero se le prohibió que regresara jamás a las Indias.
Sin embargo el rey ordenó la incautación del Marquesado, lo que significó que la Corona tomó el control de la propiedad y de todos sus ingresos; los hermanos Cortés fueron expulsados de la Nueva España y se les prohibió volver.
Don Martín, el 2° Marqués, obtuvo de Felipe II el perdón real en 1574, lo que le permitió regresar a España de su exilio en Orán, al noroeste de Argelia, y recuperar parte de sus propiedades incautadas en México. Sin embargo, se sostuvo la prohibición de su regreso a Nueva España.
En 1589 fue sucedido en el título por su hijo mayor, Don Hernando Cortés, 3° Marqués, a quien le fue reintegrado el resto de su patrimonio en 1593. Sin embargo, a pesar de que la incautación fue levantada en 1593, los Marqueses perdieron el control directo de la administración de la propiedad, ya que tuvieron que mantener la estructura a través de la cual la Corona había estado trabajando, que les quitaba la autonomía de gobierno que solían ejercer.
El 3° Marqués no dejó hijos legítimos, por lo que a su muerte, en 1602, el título pasó a su hermano, Don Pedro Cortés, 4° Marqués, quien pudo asentarse en Nueva España y asumir personalmente la gestión de la propiedad, que había sido controlada por administradores desde 1567. El 4° Marqués también murió sin descendientes, por lo que, en 1629, terminó la línea directa de Hernán Cortés. El Marquesado fue heredado por la hermana de Hernando y Pedro, Doña Juana Cortés, 5° Marquesa, esposa de Don Pedro Carrillo de Mendoza, 9° Conde de Priego.
A su muerte, su hija mayor, Doña Estefanía Carrillo de Mendoza y Cortés, casada con el duque de Terranova, Diego Tagliavia Aragona, heredó el título, lo que la convirtió en la 6° Marquesa. Tras la herencia del título, de acuerdo con el mayorazgo o vinculación, la familia adoptó el nombre de Tagliavia Aragona Cortés.
Doña Estefanía y Don Diego tuvieron una sola hija, Juana (Giovanna), 7° Marquesa, una de las más ricas herederas de su tiempo, que se casó con Héctor (Ettore) Pignatelli, 5° Duque de Monteleone, dando a luz a una dinastía que reunió a la inmensa riqueza de los Aragonas, los Tagliavias, los Pignatelli y los Cortés, con sus títulos y feudos, entre los cuales el Marquesado mexicano fue la joya de la corona. Tras el matrimonio, el esposo asumió el nombre de Pignatelli Aragona Cortés para él y todos sus descendientes.
Los Pignatelli Aragona Cortés continuaron recibiendo de la Monarquía Española las mercedes otorgadas por Carlos V a Hernán Cortés de manera regular, incluso después de realizarse la independencia de México, ya que al principio las deudas públicas del virreinato fueron reconocidas íntegramente por el nuevo país.
En la primera mitad del siglo XIX, los Pignatelli designaron a Lucas Alamán como su apoderado en México, quien defendió la continuidad del pago de las rentas del Marquesado, pero los liberales cancelaron dichos pagos. Rotos los lazos económicos, los Pignatelli vendieron sus propiedades en México.
El título nobiliario fue rehabilitado por el rey Alfonso XIII en 1916 a favor de José Pignatelli Aragón Cortés y Fardella. En 1984, al morir sin descendencia el marqués Giuseppe Aragón Tagliavia Pignatelli Cortés, se extinguió la rama masculina de los Pignatelli Aragón Cortés. El marqués era además príncipe de Noia, duque de Monteleone y de Terranova. Esos títulos pasaron a su primo hermano Nicolo Pignatelli Aragón Cortes, Príncipe del Sacro Imperio Romano Germánico.
Palacio de Cortés en Cuernavaca, cabecera del Marquesado del Valle de Oaxaca
I
Sancho I Ramirez DE ARAGONA,
(n. 1042c., + 1094),
2° Rey de Aragona,
I
Vela DE ARAGONA,
(n. 1080c.),
Conde,
I
Rodrigo (Ruy) Gomez DE ARAGONA,
(n. 1100c.),
Conde de Salamanca,
I
Rodrigo (Ruy) Gomez DE ARAGONA,
(n. 1130c.),
de los Condes de Salamanca,
I
Fernando Rodriguez DE VARELA / DE LAS VARILLAS,
(n. 1160c.),
Señor de San Ramon,
I
Pedro Rodriguez DE LAS VARILLAS,
(n. 1200c.),
Ricohombre de Navarra,
& 1225c. Estefania JURO’,
I
Sancho Perez DE LAS VARILLAS,
(n. 1225c.),
Ricohombre y Canciller Mayor de Castilla
I
Rodrigo DE LAS VARILLAS,
(n. 1245c.),
& Ines Teresa Godiñez,
I
Gonzalo Rodriguez DE LAS VARILLAS,
(n. 1270c., + 1345c.),
Señor de Canillas de Tornellos,
& 1289c. Teresa Martinez NIETO,
(+ 1308),
de los Señores de Ledesma
I
Juan Rodriguez DE LAS VARILLAS,
(n. 1290c.),
Caballero de la Orden de la Banda, 1° Señor de Cempron y de Bernuy,
& Maria Hernandez DE MONROY,
(n. 1295c.),
3° Señora de Monroy
I
Hernan (Fernando) DE MONROY,
4° Señor de Monroy
& Isabel (Catalina) DE ALMARAZ,
(n. 1385c.),
Señora de Deleitosa
I
Rodrigo (Ruy) DE MONROY,
(n. 1400c., + > 1461),
5° Señor de Monroy,
& 1428 Mencia Alfonso DE ORELLANA LA VIEJA (ALTAMIRANO),
(n. 1418c.),
de los Señores de Orellana la Vieja,
I
Rodrigo (Ruy) Fernandez DE MONROY,
(n. 1435c.),
de los Señores de Monroy,
& Maria LA CUEVA - CORTES,
(n. 1420c.)
I
Martino CORTES DE MONROY,
(n. 1455, + 1525),
Hidalgo, de los Señores de Monroy, Capitan de caballeria,
& 1483 Caterina PIZARRO (ALTAMIRANO),
(n. 1465c., + 1535)
I
Hernan CORTES « El Conquistador »,
(n. 1485, + 1547)
I
Lope CORTES DE PARRES,
& Eulalia DE ABAMIA
I
Nuño CORTES,
I
Martin “el Viejo” CORTES,
& F DE MONROY
I
Martino CORTES DE MONROY,
(n. 1455, + 1525),
Hidalgo, de los Señores de Monroy, Capitan de caballeria,
& 1483 Caterina PIZARRO (ALTAMIRANO),
(n. 1465c., + 1535)
I
Hernan CORTES « El Conquistador »,
(n. 1485, + 1547)